Yamil Brenes

Coach Internacional en Rendimiento Deportivo, Salud, Longevidad y Trabajo Mental

Nota: al aportarte esta guía no pretendo sustituir el asesoramiento de un médico especialista en el tema, siempre mi consejo para ti, será tener una guía profesional al respecto, te enfatizo que mi idea no es suplantar la asesoría médica, sino aportarte información para que puedas tomar mejores decisiones.

¿Qué probablemente pasó?

Durante el ejercicio intenso, especialmente en condiciones de calor, tu cuerpo está sometido a varios factores que pueden desencadenar la producción excesiva de moco nasal (rinorrea) o una “moquera” constante.

En tu caso, siendo un alto rendimiento, el flujo de aire, la temperatura, la humedad y el esfuerzo se combinan.
 

Estos son los mecanismos más relevantes:

Hay un fenómeno llamado Exercise‑induced rhinitis (rinorrea/exceso de moco inducido por el ejercicio).

Se caracteriza por congestión nasal, secreción acuosa de la nariz, estornudos o picor nasal durante o justo después del ejercicio físico.

Cuando haces un esfuerzo intenso, inhalas mucho más aire del habitual, a mayor volumen y velocidad, lo que somete la mucosa nasal a más exposición de aire, calor, posibles irritantes y necesidad de humidificación.

Por ejemplo, cuando respiras fuerte por la nariz, esto puede irritar los conductos y como consecuencia se produce más moco.

El calor y la humedad o incluso la sequedad del aire pueden alterar la función normal de la mucosa nasal. Aunque mencionamos más frecuentemente frío o aire seco, el calor también puede generar mayor vasodilatación, mayor flujo sanguíneo en la mucosa nasal, y activar vías de secreción.

Además, los cambios en la circulación durante el ejercicio (vasoconstricción inicial seguida de vasodilatación), junto con mayor temperatura corporal, pueden ocasionar que la nariz “trate” de regular la entrada de aire, humidificarlo y limpiarlo, lo cual se traduce en más moco.

Por ejemplo, en el artículo: “normal Nasal Response to Exercise” se explica que el ejercicio obliga a los vasos sanguíneos a contraerse y luego ajustarse, lo que puede afectar la mucosa nasal.

También, si hay presencia de alérgenos en el ambiente (polvo, pólenes, polvillo del trail) o irritantes (aire cargado, sudor, polvo del camino), podrían haber actuado de desencadenantes adicionales de ese “gotear” nasal. La literatura indica que tanto la rinorrea alérgica como la no alérgica se pueden activar por ejercicio.

Por tanto, lo que experimentas no es algo alarmante en sí, sino una respuesta fisiológica que muchos deportistas de fondo o de resistencia experimentan, sobre todo cuando cambian condiciones ambientales, intensidad o volumen de entrenamiento de forma notable (como en un día de competencia con calor).

Qué hacer para los próximos días de competencia

Para que esta «moquera» no te moleste tanto, o por lo menos esté bajo control mientras afrontas los siguientes dos días, aquí tienes unas recomendaciones prácticas:

Hidratación adecuada
Asegúrate de mantener una buena ingesta de líquidos antes, durante y después del esfuerzo. La mucosa nasal “prefiere” estar bien humedecida para funcionar correctamente. Un estado de deshidratación favorece que se irrite más y produzca moco.

Respiración controlada
Trata de que, cuando sea posible, respires por la nariz durante los tramos más moderados (aunque en ejercicio a intensidad a veces se complica). Esto ayuda a filtrar y humedecer el aire antes de que llegue a la mucosa nasal. Según la fuente: “Focus on breathing through your nose as much as you can… nasal breathing helps … filter the air.”

Protección del ambiente
Si el aire estaba muy caliente, seco o sucio (polvo, vegetación, etc.), considera usar bufanda ligera, pañuelo o un pequeño pañuelo que cubra parcialmente la nariz para humidificar ligeramente el aire que respiras. Aunque no se hable tanto de calor, la idea es reducir la irritación de la mucosa.

Lavado nasal con solución salina (pre/post carrera)
Justo antes de arrancar, o al terminar, un enjuague nasal suave con solución salina puede ayudar a limpiar los alérgenos o irritantes, y mantener la mucosa más “tranquila”. Hay artículos que lo mencionan como medida preventiva.

Evitar otros irritantes
En la tarde/noche que precede al segundo día, procura evitar ambientes con mucho polvo, humo, productos de limpieza fuertes, alérgenos que puedas conocer (si sabes que eres sensible), ya que tu mucosa estará “más vulnerable”.

Monitoreo
Está bien mientras sea moco claro, fluido, sin otros síntomas (dolor, fiebre, color verde-amarillo, malestar fuerte). Si notas que se vuelve persistente, espeso, con otros síntomas (dolor de senos, fiebre, dificultad para respirar) entonces habría que descartar infección o una rinitis activa más seria. Las fuentes señalan que, si los síntomas no mejoran o cambian de aspecto, es momento de consultar.

Consejo:

Enfócate hoy en recuperarte bien del primer día, mantener la hidratación y hacer los “ajustes” ambientales que podamos para que los siguientes días de competencia y ejercicio intenso sean lo más “limpios” posible en cuanto a molestias nasales. No te preocupes demasiado: es algo bastante común en atletas de alto nivel cuando la intensidad + ambiente + volumen se combinan.

En Triton Body & Mind tenemos un método para ayudar a definir sus zonas de entrenamiento en una prueba de 6 días, si quiere saber cuales son tus mejoras zonas de entrenamiento, tu zona de entrenamiento para bajar de peso, tu zona de competencia, puedes preguntar como podemos ayudarte sin compromiso escríbenos al servicio al cliente  con gusto le orientaremos en el proceso.